Llega un punto en el que se pierde el control de las cosas. Por no decir el norte. El punto en el que tienes que renunciar a lo único que has querido en tu vida. Crece el vacío. Estás viva pero tampoco demasiado. El dolor es demasiado fuerte como para que olvides despertarte cada mañana. En ese punto, intentas encontrar razones para no arrojar la toalla definitivamente, mientras ves que la toalla cae por su propia inercia.
Es la tragedia griega lo que te mantiene en pie. Maldito sea el coro.
No no, maldito no, bendito.
Nunca está todo perdido, un día sale el sol y lo ilumina todo. No soy meteorologo, pero salir sale. Ya lo verás.
Posted by: Alfred on 9 de Abril 2004 a las 01:51 PMYa lo decía Kafka: "A partir de cierto punto no hay retorno. Ese es el punto que hay que alcanzar."
Posted by: K on 9 de Abril 2004 a las 03:12 PMLo bueno que tienen los puntos es que solo son eso, puntos. Y siempre se puede poner un buen punto y aparte e empezar de nuevo.
Posted by: peke on 9 de Abril 2004 a las 09:11 PMLas cosas pasan sin más luego todo depende de como nos las tomemos...Besos y que le den por el culo al coro, que no te soluciona nada, la vida la vive cada uno, sin opiniones...
Posted by: mOe:) on 10 de Abril 2004 a las 12:09 PM