Teniendo en cuenta que cuando abro la boca no doy una a derechas, me cuestiono el punto tres de este pentálogo, con el fin de evitar males mayores y daños innecesarios. Pero teniendo en cuenta también, que la gente a mi alrededor merece tener una mayor comprensión de aquello que acontece dentro de mi cabeza, a la hora de evaluar muchas de mis acciones, creo que es bueno un poco de sinceridad. Aunque joda. Claro que soy torpe y la saco a pasear cuando no debo, y me llegan las malas caras contra reembolso, y me arde la conciencia, debo ser mala, muy mala, por pensar esto y aquello y lo de más allá.
No soy tan mala. Ni pretendo cambiar el mundo. Sólo quiero cambiar esta parte de mí que me duele tanto.
No se pueden cambiar esas partes del cuerpo que te duelen, sólo se pueden callar las voces que atormentan nuestras cabezas. ¡Silencio! ¡A callar! ¡Dejad a Kaptain!
Posted by: Pedro on 8 de Septiembre 2003 a las 04:01 PMa veces mi cabeza es como una olla a presión. no quiero pensar, no quiero pensar, no quiero pensar...
Posted by: Kapt. Kurtz on 8 de Septiembre 2003 a las 04:19 PMEs cierto, a veces hablar da muchos problemas. Pero es de valientes. Quien calla, otorga.
Difícil encontrar un equilibrio...
No eres mala. Sólo es ese estúpido sentido de culpabilidad que debiéramos enterrar en cal viva.
Posted by: not a pretty girl on 8 de Septiembre 2003 a las 05:23 PMYo creo que lo bueno de la sinceridad, como nos hace decir las cosas tal como son, es que no nos hace responsables de las malas caras de los demás, ni debería quemar la conciencia de nadie.
Posted by: e on 8 de Septiembre 2003 a las 05:29 PMLa sinceridad es buena, pero hay una delgada linea entre sinceridad y sincericidio...
Consejo: no te sincericidies.
A veces es aleccionador enfrentarse a alguien devastadoramente sincero.
Para esas personasdecir la verdad es un acto reflejo y lo hacen sin culpabilidad ninguna, porque, a fin de cuentas, estan diciendo lo que hay. Ser devastadoramente sincero es una actitud egoista a veces, y cómoda siempre. No hay que justificarse, no hay resquicio para la culpa o el remordimiento. A fin de cuentas, pasó asi y punto. Puede que los que esten contando les deje como auténtic@s hijos de p... pero la verdad les hace de escudo.
Yo no tengo una sinceridad de esas de destrucción masiva. Mi sinceridad es mas ocasional, más selectiva. No por mentiroso. Quizás por cobarde...
es tan sincera una lengua inquieta como una mala cara espontánea. Pero sólo es eso, una mala cara. No calles, kurtz!!! Después de las malas caras vienen las gracias por saber que han sido sinceros contigo.
Posted by: vann on 9 de Septiembre 2003 a las 07:25 PM